Si Franco Colidio hubiese asegurado su penal al otro costado de Guido Herrera, la alfombra estaría más gorda.
Un resultado disimula lo sucio, una copa (incluso un engendro) alivia siempre.
Pero el fútbol, aun siendo el deporte menos lógico porque tiene la mayor cantidad de variables posibles en cada acción, igualmente guarda coherencia.
Los detalles inclinan hacia uno u otro lado la apreciación general.
Sin sustento, más temprano que tarde la lógica aparece.
No era normal que el miércoles River festejara.
A esta altura del año, lo que le cabía era el replanteo..